En el tiempo que llevo en el mundo laboral me he dado cuenta que las prácticas tienen la misma importancia que ser un empleado; ya que tienes las mismas responsabilidades. Incluso si lo pienso mejor, diría que las prácticas pueden tener un papel más crucial en tu carrera profesional porque es tu primera presentación en el mundo laboral y en tu carrera profesional. Por eso es muy importante dedicarle el mismo esfuerzo, aprovechar el máximo esta oportunidad y evitar cometer ciertos errores posibles.
A continuación vamos a detallar cuáles podrían ser y de este modo, si las conoces podrás evitarlas más fácilmente.
Mostrar desinterés
Muchas personas no muestran interés en las tareas que realizan, como si no fueran importantes. Lo que transmiten es que parece que no quisieran hacer las prácticas y esta actitud puede perjudicar en tu carrera profesional.
No saber aceptar las críticas
Hay gente que en vez de escuchar las críticas constructivas, se cierran y muestran una actitud negativa. Las críticas realmente son muy útiles, son la oportunidad para mejorar tus habilidades. Incluso tú deberías ser crítico contigo mismo antes que alguien te lo diga.
Confiarse demasiado
Algunos becarios cuando ya llevan un tiempo trabajando se vuelven demasiado confiados y hacen cosas que no deberían hacer como llegar tarde, hacer llamadas personales,… Sé profesional y no lo hagas. Asimismo, mostrarse demasiado seguro puede ser contraproducente y podría parecer que seas más bien arrogante.
Desaprovechar la oportunidad y malgastar el tiempo
Sé proactivo, que no te tengan que decir siempre lo que tienes que hacer y toma el riesgo de hacer tareas nuevas o que no sean las propias, y así a la vez podrás conseguir obtener conocimientos más allá de los de tu departamento, crecer y llegar más lejos. De ese modo, comprenderás mejor la empresa y tus tareas se volverán más interesantes.
Trabajar hasta tarde o hacer horas extras
Éste es uno de los errores menos pensado según algunos universitarios, pero es cierto que tu supervisor podría pensar que no llegas a tiempo con los plazos o no cumples con el tiempo de las tareas.
Vestir demasiado informal
Muchas empresas no requieren una vestimenta específica pero a veces se confunde la palabra “informal” y se exceden. La vestimenta depende realmente de tu posición y las tareas que desempeñas; si tu trabajo consiste en estar en contacto con los clientes deberías vestir más formal. Ante la duda mejor arreglarse.
Distracciones
Aunque puedas creer que tu móvil o correo personal no son una distracción, utilizarlo puede no causar una buena impresión. Y otra cosa, ¡no pierdas el tiempo en las redes sociales!
Ser demasiado pasivo
La timidez no es un buen aliado. Aunque seas inteligente, si no eres capaz de expresarte ni darte a conocer, perderás muchas oportunidades. Es muy importante mantener el contacto directo con tus compañeros y pedir ayuda a los supervisores.
Evitar eventos laborales
Algunas veces se organizan eventos más informales para fomentar la relación entre compañeros. Rechazarlos, aunque creas que es positivo, podría parecer que no entiendes los valores de la empresa y los conceptos de la vida laboral. Además pierdes la oportunidad de conocer realmente a tus compañeros.
Ahora que ya conoces los posibles errores que se podrían cometer, esperamos que te sirva para evitarlo y demostrar lo mejor de ti. ¡A por ello!
Si aún no estás trabajando en prácticas, visita dada.career y encuentra tu próximo empleo.
¡Te deseo un buen día!
Y ya no solamente los eventos laborales. Todas las oportunidades que haya de quedar, aunque sea para tomar algo rápido, trata de aprovecharlo. Es en estas ocasiones cuando más te van a conocer.